La monetización de los vídeos
YouTube se ha convertido en un trabajo para los denominados ‘youtubers’. Y, como cualquier profesión, lo es porque se obtiene una remuneración gracias al esfuerzo. Es difícil calcular la monetización de los vídeos y los propios creadores de contenidos son reacios a hablar del tema. No obstante, El Renao explica que depende de muchos factores, ya que no tiene el mismo valor la publicidad que puedan insertar en plena campaña navideña que la que pueda haber en agosto. “En mi caso, si tienes 3.000 visitas en un vídeo generas muy poco. Tres dólares diría yo. Yo le quito siempre los tres ceros”, asegura este ‘youtuber’ valenciano. La relación visitas-dólares suele girar en torno a los 500 dólares -430 euros, aproximadamente- por cada millón de visitas. Unas cifras que hacen muy complicado vivir plenamente de la plataforma.
Pese a que son números muy llamativos, solo los grandes creadores de contenidos pueden dedicarse a tiempo completo a la plataforma. Un gran número de seguidores conlleva, a su vez, una cantidad de visitas que hacen plausible la profesionalización de los creadores de contenidos. No obstante, junto con el dinero que dejan los anuncios que cuelga el propio YouTube, también entran en escena las colaboraciones con marcas. Distintas marcas y empresas contactan con los ‘youtubers’ para patrocinar contenido y que sus productos salgan en los vídeos. En el caso de Korah, recientemente colaboró con Netflix en la promoción de una de sus series mediante un vídeo en el que doblaba de forma humorística algunos pasajes de la misma. En el caso de los ‘youtubers’ más pequeños admiten que no hay tantas marcas interesadas en patrocinarlos, pero reconocen que YouTube les ha abierto una ventana al mundo laboral.
Las horas que dedican los creadores de contenidos a la plataforma, en muchos casos, no están compensadas con la remuneración económica que perciben. Por lo general, el proceso de elaborar un vídeo lleva varios días de trabajo. Hay excepciones, como es el caso de los gameplays. Pero pensar la idea del contenido, elaborar un guión, grabarlo, editarlo y subirlo, es una tarea que requiere esfuerzo y dedicación, según apuntan los propios ‘youtubers’. Máxime cuando no viven de la plataforma y lo hacen por hobby. De hecho, para gente como El Renao o Rafael Escrig, lo más complicado es encontrar la idea. En ocasiones dedican más tiempo a este apartado que al resto del proceso. Y, una vez acabado el vídeo, evalúan la calidad y si está en óptimas condiciones para ser lanzado. “No es la primera vez que desecho un vídeo porque no me gusta el resultado final”, admite René Cuevas.
Para algunos, la plataforma ha sido un trampolín hacia otros proyectos profesionales. Es el caso de René Cuevas, quien gracias a su carisma y humor en valenciano, ha conseguido hacerse un hueco en el nuevo ente valenciano À Punt. Pese a que no puede dar muchas pistas, asegura estar muy contento por esta oportunidad que le brinda la radiotelevisión pública valenciana. A otros, en cambio, sus respectivos canales los han situado en el mapa. Es el caso del periodista deportivo Rafael Escrig, cuyo trabajo en la plataforma le ha llevado a conocer a futbolistas profesionales e importantísimos clubes de futbol como el Manchester City, AC Milán o el Villarreal CF le han abierto sus puertas para grabar vídeos. Un perfil en la plataforma que le está sirviendo como escaparate en el mundo de periodismo y la comunicación.